Una vez que se mancha la
conciencia, ya no se limpia más, y la gente que tiene el poder en Guinea
Ecuatorial, ha demostrado que, en caso de tener conciencia, cosa que dudo, la
tiene muy sucia. ¿Cómo es posible que una familia y su clan opriman a este
país? ¿Cómo es posible que unos pocos dominen a muchos?
La respuesta es sencilla y compleja a la vez.
Sencilla porque solo se necesita un primer elemento para ejercer ese poder, la
violencia. Y es compleja porque la violencia se transforma. En algunos casos,
ya ni siquiera es necesaria la violencia física. No se necesita matar a todo un
pueblo para someterlo. La violencia aplicada en su justa medida y como elemento
de control deriva en el miedo, el desinterés, el conformismo. Si tengo miedo a
que me hagan daño a mí o a mis familiares, me conformo con lo que tengo. Si por
hablar más de la cuenta o por quejarme de algún tema en concreto me van a
acusar de ser un opositor al régimen, y todo el mundo sabe las consecuencias de
ser opositor en Guinea Ecuatorial, intentaré mostrar un profundo desinterés por la política. Si veo que el gobierno me
expropia los terrenos sin indemnización, me muerdo la lengua y no digo nada,
total no se puede hacer nada y a ver si por hablar más de la cuenta acaba uno
en Black Beach. Y si, y si, y si….todo se resume en un segundo elemento, el miedo.
¿A qué tiene miedo la gente? A
que la peguen, maltraten, torturen y en el último de los casos, a que la maten.
Es la cultura del miedo. Y la gente sabe, que en un país donde se vive en esas
condiciones, es la vida, y no solamente la propia, lo que se juega uno. El
monopolio de la violencia en Guinea Ecuatorial es cosa del estado y como en todo
estado dictatorial, la violencia se utiliza para oprimir. Guinea Ecuatorial es
un país pequeño y podemos decir que la gente ya aprendió la lección durante la dictadura de Macías.
El que quiera libertad, que se marche. El que quiera democracia, que se marche.
El quiera progresar en Guinea Ecuatorial, que se manche la conciencia.
Y ahí está el tercer elemento, la
corrupción. La corrupción es el elemento que marca la diferencia en Guinea
Ecuatorial. No en términos políticos sino económicos. El que tiene en Guinea sabe
perfectamente por qué tiene y el que no tiene, también. No me voy ni a molestar
en hablar de ningún caso en concreto porque sabemos perfectamente el origen de
todo este sistema: Obiang, su familia y el clan de Mongomo. Y precisamente Obiang,
su familia y su clan entienden que el pueblo solo tiene una opción para
sacarles del poder, la violencia. De ahí esa obsesión que tienen por los golpes
de estado. Ven posibles golpistas hasta en los colegios. Sabemos que se fían
mucho de los guineanos y por eso tienen mercenarios protegiendo a un supuesto
presidente como Obiang al que le voto el 95% de la población. En fin, cría
vientos y recoge tempestades.